Por qué...?

-¿Por qué nunca nos besamos?


-Porque si un electrón choca contra un protón, estallarían y nadie sabe lo que podría pasar. Y siempre tuve miedo de hacerte daño. Por eso, supongo, nunca nos besamos.







Nunca me gustó la química.




Nieves

Soy...

Me encanta ser libre. Nunca dejé que nadie me atara. Me chifla esa libertad y admito que a veces me gusta estar sola. Soy la más feliz cuando me cruzo la mirada con un guapo desconocido y me encanta conocer gente. Pero tampoco nos pasemos. Hay que ser precisos y concisos y saber hasta dónde llega ese límite. He de admitir que ni eso me llena, ni ningún chico me llena desde hace tiempo. Y eso lo sé. El otro día hice una actualizacion con las cosas que echaba de menos. Y aunque tal y como dije anteriormente, me encanta ser libre, tambien echo de menos enamorarme...y eso...eso es normal.



Era jueves cuando todo terminó...


O mejor dicho, cuando todo empezó...



Nieves

Caresse sur l'ocean

Cuando los sapos bailen flamenco

Me alegra tanto escuchar tus promesas mientras te alejas...


Saber que piensas volver algún día, cuando los sapos bailen flamenco...


Y yo te espero, ya ves, aunque no entienda bien que los sapos puedan dejar de saltar y bailar lejos de su charco...







Nieves

Ayer recordé...

Ayer recordé cómo te sientes cuando estas enamorada. Cómo te encuentras viviendo dia a dia tan solo por verlo. Cómo dejas a un lado cualquier cosa que estés haciendo por él. Los mil y un apodos que os buscais. La de chorradas que le dices por verle sonreir. La sensacion que te entra cuando estás acostada y te suena el movil anunciando un nuevo mensaje. El presentimiento de que este es de verdad y que va a durar. Los celos de hojalata. Los supuestos enfados que te entran para que haya una reconciliacion cariñosa. Las tardes a solas. Hacerte la tonta mientras te pasas por donde está él para que te sorprenda. Las dudas de si me seguiras queriendo mañana. Los TE QUIERO al oído de medianoche. Cómo te coge de la mano cuando no te lo mereces. Las preguntas de las marujas en plan: QUE ESTÁS CON....? y tu respondes a boca llena SÍ., Las miradas de complicidad, los juegos de niños, las caricias, las despedidas de los mejores días de tu vida a su lado, Las ganas que te entran de que se pare el reloj porque estas realmente agusto, la primera foto juntos, la tranquilidad de que te diga QuÉ GUAPA ERES aún estando en pijama con la cara hinchada y los pelos alborotados. Los secretos de él con tu amiga buscándote el regalo perfecto, el deseo de dormir junto a el, El primer: ESTOY ENAMORADO DE TI,lo insoportable que te pones cuando no lo ves un dia, los papelitos con su aroma que ponen TE QUIERO para que te acuerdes de él simpre que no esté contigo, Los cachondeos de tus padres cuando empiezan a sospechar algo, cuando coges su movil y te tiene de fondo de pantalla y te dice muy orgulloso PARA QUE VEAN TODOS LA NOVIA MAS GUAPA QUE TENGO, cuando te ve y te dice: GUAU!!=O, o cuando sin venir a cuento en medio de una conversacion comenta....eres perfecta y tu te kedas =O=O=O=O??,........




Recuerdos que se desvanecen pero que te vienen a veces cuando estás en noches melancolicas como esta.

Él un dia me kitó de su fondo de pantalla, yo tiré ese papel que ponia TE QUIERO con su aroma,ambos eliminamos nuestra primera foto juntos,ninguno de nosotros guardamos esos sms que te enloquecían y leías una y otra vez, ya ni siquiera recuerdas cómo lo llamabas o tal vez sí, ahora sólo tienes ganas de que el reloj avance cuando lo ves por la calle,
él tiene otra chica perfecta y yo no quiero volver a tenerlo.







Pero merece la pena.









Nieves

Elotroladodelahermosura

Le quiero mas que a nadie en el mundo. Y él igual. Pero yo no quiero admitir que le quiero. Ojalá supiera por qué. Pero sé que le quiero porque a veces lo nombro por casualidad, y a veces, solo a veces, me despierto en madrugada poniendole trampas a la cama buscándole.

Qué pena que por un NOSEKÉ que no se qué es, se me haga tarde.

Pero yo le quiero mas que a nadie. Y el tambien. Qué pena que él crea que no lo quiero. Si él supiera...

Si él supiera que por él tuve que elegir...

Si él supiera que por él yo me corté las alas...

Pero el problema soy yo. YO y siempre YO. Yo y mi todo y mi deseo de la perfeccion. Pero puede que la perfeccion se encuentre en el otro lado de la hermosura.


Pero te juro que yo lo quiero. Y él a mi. O eso creo. Es que no quiero que pase lo d siempre. Es que lo veo poco. Es que...es que...

Inexplicable.

Pero te juro que yo lo quiero.




Recuerda que tengo el tiempo entre los dientes para ti.

Lo último y lo primero

Son ciertas muchas cosas de mí, ciertos todos esos pequeños demonios, cierta mi determinación a predeterminar mi futuro, a caminar sola, a valermelas por mí misma, a alejar, a ser catégorica. Cierto todo aquéllo.

Pero, a veces me pregunto si mi perfecta determinación no es más que una mentira que me digo a mí misma para seguir día tras día.

Es cierto de igual manera, que existen noche, mañanas, minutos, horas, segundos, en los cuales me siento una niña pequeña y anhelo tener unos brazos más fuerte en los cuales acurrucarme.

A tiempos deseo un beso de buenas noches, un te quiero, un voy a estar ahí, una palabra, una mirada, un gesto.

Hay días en los cuales no me basto sola y tampoco quiero hacerlo.

Pero soy demasiado cobarde como para admitirlo de cara al mundo, me limito a escribirlo, a que nadie lo sepa.

Hay días que me siento tan sola, siento un vacío más allá de lo metaforico que suene "vacío", éste es real, casi puedo palparlo.

Y tanto como me duele el tener, me duele el no tener.

Sospecho que duele tanto el querer como el no querer. Y quizás éste último provoque el mayor daño, pues implica el arrepentimiento y esta soledad verde que como y bebo a la hora del coktail.

Quisiera ser consecuente con lo que hago al mundo creer y lo que realmente siento. Pero pareciera crecer un abismo entre ambos. No logro decir lo que siento, en su lugar, invento palabra de adiós y distancia.

Temo el más minímo roce, contacto de una piel ajena con la mía. Realmente siento, me disolvería en pequeñas particulas.

Es cierto que intento no creer en el amor, en nombrarlo el más cobarde de todos, en recalcar sus defectos y dolores... pero... Me gustaría tanto intentarlo.

Sé que es casi imposible conocer las palabras que no digo, ni entender los gestos que no doy...

Y sé que ningún hombre tiene la paciencia, el coraje o el amor para quedarse aquí en suelo hasta que yo me sienta con la fuerza para ponerme de pie.

Sé que ningún hombre soportara mis rechazos, mis gritos, mi psicosis y luego mi ternura y mi voz llamandolo entre sollozos.

No tienen que decirmelo, yo lo sé y me duele.

Sé que las noches serán vacías, sé que aquél hombre se cansó. Finalmente se cansó. Puede verlo en sus ojos. Ahí estaba mi enemigo, me sonrió y alejó a aquél hombre de mi orilla de caos y amor.

Sé que no debo buscarlo, que debo dejarlo ir. Que el cansancio trabajó en él, y aunque pudo quererme, el desgaste pudo más.

Él es un hombre paciente, racional, esforzado, pausado... Un hombre así se va y no regresa.

Quizás tampoco deba hacerlo, sé que terminaría dañandolo. Y él merece ser feliz, merece una mujer menos caótica que yo para que lo acurruque y lo quiera.

Mejor será aceptar lo perdido, llorar esas lágrimas negras de maquillaje y oscuridad y dormir, que mañana él no estará.

Un golpe sordo, la puerta cerrandose detrás de mi.

Él anhelaba un final con tragedia, algo mágico.

Aquí te lo doy, al menos que sea lo último y lo primero que hago por ti.